Bogotá, febrero 26 de 2019 (Prensa FNC) – El Comité Nacional de Cafeteros anunció una serie de medidas a corto, mediano y largo plazo para enfrentar la difícil situación que vive el sector por la fuerte caída del precio internacional del grano, que lleva 27 meses retrocediendo de forma sistemática.
A corto plazo, el Ministro de Hacienda y Crédito Público, Alberto Carrasquilla anunció la reactivación del apoyo directo a precio, para lo cual se reasignarán los recursos que habían sido destinados como capital semilla al mecanismo de estabilización.
“Vamos a repensar la asignación de los 95 mil millones que quedan del año pasado. Vamos a encontrar la manera de canalizar esos recursos hacia la atención de este momento tan difícil”, dijo Carrasquilla a la salida del Comité realizado hoy en Bogotá, aclarando que la medida no es automática, pues hay restricciones legales que deberán tomarse en cuenta para implementarla a la brevedad.
Programa de apoyo en fertilizantes por $14 mil millones
Otro anuncio del Gobierno a corto plazo es un programa de apoyo en fertilizantes para las renovaciones por siembra y zoca en 2019 con recursos del Fondo Nacional de Cafeteros y del Gobierno por 14 mil millones de pesos.
Y por su parte, el Ministro de Agricultura, Andrés Valencia, anunció que revisarán las deudas que tienen los cafeteros con el Banco Agrario, con al ánimo de ofrecer alternativas de pago que ayuden a los productores a sobrellevar esta difícil situación.
“Nos comprometimos a revisar la cartera del sector cafetero y a mirar cómo están los días de mora y cómo podemos aliviar las deudas”, dijo Valencia, quien recordó que la cartera del sector cafetero con el Banco Agrario asciende a 1,2 billones de pesos.
Contemplan medidas estructurales de largo plazo
Por otra parte, el Comité Nacional, en cabeza del ministro de Hacienda, analizó posibles soluciones estructurales a la situación del sector cafetero, tales como la venta del café colombiano sin tener como referencia la Bolsa de Nueva York, en un claro reconocimiento a los esfuerzos y a la calidad del café colombiano.
Esta iniciativa que deberá profundizarse en su análisis, debe contar con el aval de los propios cafeteros, el acompañamiento de países productores de cafés arábigos lavados, y el compromiso y la corresponsabilidad de todos los actores de la industria, dado que el eslabón más vulnerable, el de los cafeteros, pone en riesgo la sostenibilidad de toda la cadena.